
Arbusto espinoso que raramente supera los 2 m. de altura, de ramas delgadas y angulosas, lampiñas, tiene fuertes espinas de tres o cinco púas. Tallos rojizos que al romperse se colorean de un amarillo muy vivo.
Las hojas surgen en primavera agrupadas en las axilas de las espinas; son simples, ovales, algo coriáceas y lustrosas, aserradas, estrechadas hacia la base hasta rematar en un corto rabillo. En el otoño toman tonalidades rojizas.
Flores amarillas de olor repelente, reunidas en racimos colgantes. Con 3 sépalos internos y 3 externos, todos como si fuesen pétalos, y 6 pétalos dispuestos de la misma forma, de igual color y con un par de glándulas nectaríferas en la base.
Frutos rojizos en racimo de 6 a 8 mm.
En lugares abiertos y soleados; roquedos y zonas pedregosas de montaña, casi siempre aislado y bastante escaso. Normalmente pasa desapercibido.
La corteza de la raíz es aperitiva, digestiva, febrífugo y combate las afecciones del hígado y biliares. Sin embargo, puede resultar tóxica. Los frutos secos son comestibles.
Sus hojas tienen un sabor a vinagre y es por lo que en ciertos lugares de la montaña recibe el nombre de vinagrera.